¿ Qué valores debemos enseñar en la escuela ?

Reflexionando sobre este tema, es difícil decidir qué valor enseñar por encima de otro, puesto que entendemos que inevitablemente un valor lleva al otro, que muchos abarcan otros más y todos en un punto se integran.

Sin embargo, hay algunos valores que parecen tener mayor jerarquía que otros y fundamentan la posibilidad de desarrollar el resto de los mismos. Se trata de valores indispensables de señalar y enseñar:

La libertad: su significado, finalidad y alcances. Debemos reflexionar qué hacemos con nuestra libertad, para qué nos sirve y cómo protegerla, cuáles son los límites de nuestra libertad y por qué lo son.

El respeto: aprender a respetar a qué y a quiénes. El respeto y el valor por la vida, por el lugar donde se vive, tanto individual y social. También debemos fomentar el respeto por el medio ambiente.

La voluntad y el esfuerzo: como el medio para proponer y alcanzar determinados objetivos. ¿Qué significa esforzarse? ¿Qué es la voluntad?

La responsabilidad: por uno mismo, por los demás, por lo que se hace. La responsabilidad como guía y juez de nuestras acciones.

El compromiso: lo cual implica ser conscientes de las consecuencias que tienen nuestras propias convicciones, ejercitando la propia conducta y colaborando con uno mismo y con el entorno.

La honestidad: hacia uno mismo y hacia los demás. La honestidad como herramienta para evaluar cambios, para construir y proyectar sobre uno mismo y calcular los alcances sobre los demás.

La paz: como una actitud para analizar y resolver los conflictos. Si lo tenemos en cuenta como valor individual representa tranquilidad y calma, lo que amplía la capacidad de observar, juzgar o disfrutar. Si lo tenemos en cuenta como valor social llevaría al equilibrio, la justicia y la igualdad.

La solidaridad: valor que está unido a la generosidad y la empatía. Debemos dejar de mirarnos a nosotros mismos y centrarse en el otro.

Así la integración de más valores, que van surgiendo de forma natural encontramos la paciencia, la alegría, la bondad, la gratitud, el optimismo, la sencillez, el perdón, la comprensión, la fe, la esperanza, la sensibilidad, la confianza, el sacrificio, la superación, la lealtad, el altruismo, la justicia, la igualdad, el orden, la sabiduría y una lista interminable de valores y virtudes unidos entre sí. Todos y cada uno de ellos merecen y necesitan ser enseñados y comprendidos e integrados para poder ser transmitidos a la forma de convivir en el aula y en la escuela.